Por años se pensó que era necesario recurrir a un estímulo de entrenamiento proveniente de cargas altas para conseguir hipertrofia muscular, ya que de otra forma no se generaría un reclutamiento completo de unidades motoras (UM).
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☑️ Hasta cierto punto, lo anterior es cierto, ya que cuando se trabaja con cargas altas se genera un alto reclutamiento de UM incluso desde las primeras repeticiones, pues el esfuerzo y la demanda mecánica lo ameritan 🥵; cosa que no sucede cuando trabajamos con cargas leves-moderadas en las primeras repeticiones 😅. Sin embargo la historia es diferente cuando nos acercamos al fallo muscular 🙌🏼; ya que en este punto, incluso trabajando con cargas bajas que nos permitan realizar 25-35 RM, el reclutamiento de UM es similar al generado trabajando con cargas altas para realizar entre 8-12 RM; por tanto la hipertrofia generada en ambos casos es similar siempre y cuando nos aproximemos al fallo muscular (🔬 Schoenfeld, et al, 2015).
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Aquí podemos apreciar otro indicador para considerar que en el mundo del entrenamiento las cosas no son blancas o negras; existen múltiples matices y una completa escala de grises dentro de la que podemos movernos y aún así hacer las cosas de manera eficiente 🧠.